"Cuando alguien, viendo la hermosura de este mundo y acordándose de la verdadera, toma alas y, una vez alado, deseando emprender el vuelo y no pudiendo, dirige sus miradas hacia arriba como un pájaro y descuida las cosas de esta tierra, se le acusa de estar loco"

Platón

viernes, 19 de diciembre de 2014

Viernes 12 de diciembre de 2014. La Muela de Alarilla

Vuelo 73.

Divertido día de vuelo en la Muela en compañía de Luis y de Valín que llegó un poco más tarde.




Llegamos pronto y como apenas había viento, Luis aprovechó para hacer un par de descensos con el parapente. Después empezó a mejorar la cosa y pudimos volar con las alas.

Cometí un par de errores, el primero sin importancia, me comí la fuga del lado este y perdí bastante altura por andar toqueteando el vario. El segundo, más grave, acabó afortunadamente sin consecuencias; estaba volando junto a un par de parapentes cursillistas y al salir de un giro me despisté vigilando los trapos y me encontré de golpe con la ladera, reaccioné bien y metiendo velocidad pude girar y evitar el tener que hacer un aterrizaje contra pendiente de emergencia, o lo más probable, el haberme estampado contra la ladera.

Valín apareció poco antes de aterrizar yo arriba. Voló el ala de Luis, la mía y la suya y disfrutó como un enano con toda la ladera para él solo ya que para entonces el viento había arreciado y era excesivo para los parapentes. Fue un autentico placer ver aterrizar a Valín con mi ala, uno de los aterrizajes más suaves y elegantes que he visto en mi vida. Yo de mayor quiero ser como Valín.





domingo, 9 de noviembre de 2014

Sábado 8 de noviembre de 2014. la Muela de Alarilla

Vuelo 72

Fantástico y otoñal día de vuelo, o más bien invernal por la sensación térmica. No pensaba poder volar este fin de semana pero a última hora conseguí arreglarlo para intentarlo y aunque salí muy tarde de Madrid, afortunadamente me habían recogido mi ala así que pude ir directamente a La Muela y ganar algo de tiempo.



Según me acercaba a La Muela ya vi algún parapente desde la distancia y enseguida reconocí también el ala de Valín en el aire.

Cuando llegué ya estaba casi todo el mundo listo para despegar, el día tenía buena pinta, viento fuertecito y ladera asegurada. Me puse a montar rápido pues estaba previsto que el viento arreciase y aumentara la probabilidad de lluvia según avanzaba el día.



Despegué un poco estresado pues era mi primer vuelo después del incidente con la portería de Arcones y tras cambiar el borde de ataque tenía el runrun de si estaría todo bien montado y el ala se comportaría bien. Nada más despegar me tranquilicé al notar el ala perfecta, exactamente igual que siempre. 

Fue un vuelo típico de ladera de La Muela, con viento bastante laminar y alguna que otra térmica y la ventaja añadida del poco trafico de parapentes debido a la intensidad del viento, un día precioso con una luz fantástica y un ambiente inmejorable pues al final nos juntamos unas quince alas.



Tras una media hora de vuelo aterricé bien arriba y me dedique a disfrutar del resto del día haciendo fotos y vídeos.

Valín no paró en toda la tarde de despegar y aterrizar, si no  hizo diez o más despegues no hizo ninguno, yo de mayor quiero ser como él. Pablo aprovechó para probar la T2C de Javi y la Litespeed de Luis y luego volvió a volar su ala.

Un día de los que se disfrutan de verdad tanto por lo "ganso" de las condiciones como por el buen ambiente en general.

domingo, 7 de septiembre de 2014

Viernes 5 de septiembre de 2014. Arcones

Vuelo 71.

Fui con el Procu y Ana y llegamos un poco tarde pues nos pilló la salida de viernes de Madrid.

En el despegue ya estaban listos Javi, Rafa, Marcos Cueje, Fernado San Gregorio y su hijo. Las condiciones eran típicas de vuelo de tarde en Arcones y presagiaban una ladera disfrutona. 

Nada más despegar ya puede confirmar los presagios, el día estaba muy suave y la ladera aunque justita, funcionaba bien, no se cogía altura pero te mantenías sin problemas, estuve por las rocas esperando a que despegase el Procu y en cuanto lo hizo nos marchamos juntos hacia la muela de Navafría. La verdad es que se disfruta mucho más volando en compañía de otros pilotos y hace el vuelo más ameno y bonito.



Como el día estaba muy suave y fácil lo aproveché para practicar con la tensión metida a tope todo el rato, probando distintos giros y velocidades. 

Noté muchísimo al volar en grupo, tanto siguiendo al Procu como a Blay, la diferencia de planeo y velocidad de mi Sport 2 respecto a la Discus o la T2. Estuve un buen rato disfrutando volando junto a Blay, que me dio varias pasaditas y nos regaló algún looping.

Alargué el vuelo hasta la puesta de sol y entonces me fui a aterrizar. El aterrizaje fue un autentico desastre aunque afortunadamente sin consecuencias (excepto mi orgullo roto y algo de aluminio por reponer) y me sirvió para aprender de los claros errores que cometí, error claro de aproximación, algo que ne dolió especialmente pues creo que es la faceta del vuelo que siempre se me ha dado mejor y con la que mas cómodo me he sentido siempre.

Al pasar con altura sobre la campa vi que el viento estaba ya catabático, aunque muy flojo, así que continué hasta el pueblo para perder altura y aterrizar directamente a la vuelta. Mi primer error grave fue cambiar este plan en el último momento, podía haber entrado tal cual venía en la campa como tenía planeado, pero decidí hacer un último giro para tratar de aterrizar más cerca del camino por comodidad. Mi segundo error grave fue que olvidé quitar la tensión con lo que ese giro se alargó más de lo debido y acabé perdiendo mucha altura y desviado de la ruta prevista. Finalmente tuve que enfilar a un agujero que bastante estrecho que quedaba entre el ala del Procu y la portería, y pensé que lo conseguiría, pero desgraciadamente no fue así y el plano derecho acabó chocando con el poste de la portería. 

Resultado final, el extremo del borde de ataque derecho, dos sables y un montante rotos. Afortunadamente yo no me hice ni un rasguño y el ala del Procu también resulto ilesa.

Quiero aprovechar para agradecer otra vez al Procu y a Blay la ayuda que me prestaron para desmontar el ala pues ya se estaba haciendo de noche y sin su colaboración y teniendo en cuenta el estado que estaba el ala habría tardado el doble en terminar de recoger.


jueves, 28 de agosto de 2014

Miércoles 27 de agosto de 2014. Arcones

Vuelo 70

Algo más de una hora de vuelo térmico sin más historias que una muy buena compañía. Subimos Luis, Carlos (Parapen), Carlos Crespo, Alfredo, Procu, Pablo y yo y un poco más tarde subió Sandra.

Buen despegue desde la zona de arriba, despegue este que nunca me ha gustado, y buen aterrizaje.



domingo, 10 de agosto de 2014

Viernes 8 de agosto de 2014. Piedrahita

Vuelo 69.

El día no prometía mucho, había una capa de cirros que impedían una buena insolación del valle. Morini y Armando decidieron no subir así que al final nos subimos al despegue Pablo, Javi (Yunquera), Carlos Lucas, Ana y yo. Mientras subíamos vimos algún parapente despegar y bajar muy rápido.



Descargamos las alas y empezamos a montar, yo sin mucha convicción. Había un grupo de parapentistas ingleses que empezaron a recoger y se marcharon pues Steve Ham les había dicho que estaba muy turbulento.

Al final tras muchas dudas decidí montar, estando ya allí mejor bajar volando que en coche. Tuvimos que esperar un rato a una buena racha encarada pues el viento estaba muy cruzado de la izquierda. Me mentalicé para hacer un buen despegue, no como el desastroso del día anterior, y lo conseguí.



El vuelo no tuvo misterio fue casi un planeo, bastante movidito, directo a la escombrera excepto por una térmica intermedia con la que me puse a 2.400 m.

Aterrizamos Carlos Pablo y yo en la escombrera y Javi aterrizó en Villafranca, en la misma campa en la que había tomado yo el día anterior.

Aunque el vuelo fue muy corto me quedé con muy buen sabor de boca por el simple hecho de haber volado (después de las dudas iniciales) y por haber hecho un buen despegue y un buen aterrizaje.

sábado, 9 de agosto de 2014

Jueves 7 de agosto de 2014. Piedrahita

Vuelo 68.

Subimos Armando, Pablo, Javier (Morini) y yo, además de Ana y las niñas y en el despegue nos encontramos a Manolo Gómez de Pablos y Mani montando para intentar pegarse un vuelo directo a Arcones (153 kms).

El día tenía muy buena pinta, había una buena convergencia y viento un poco cruzado del oeste, así que Pablo propuso el intentar llegar también a Arcones. Yo sabía que para mi era prácticamente imposible pero desde luego el día era perfecto por lo menos para intentarlo, teniendo además de guías a Armando y Pablo, aún así me puse un primer objetivo mucho más modesto, cruzar el puerto de Villatoro y luego ya se vería. 

Mani y Manolo despegaron antes y pronto les perdimos de vista. Cuando estuvimos listos despegó primero Pablo y un rato después lo hice yo seguido de Armando. Hice un despegue desastroso saliendo con el ala empujada y tirándome a la piscina.



Yo encontré pronto una buena térmica a la que se unió Armando bastante más bajo, pero no tardó mucho en superarme, está claro ¡el que sabe, sabe!

Fui derivando con la térmica por la cuerda pero no acababa de centrarla bien y viendo que Pablo y Armando se escapaban la abandoné confiando en encontrar algo más adelante. Poco después empecé a girar otra térmica que abandoné otra vez demasiado pronto, a 2.300m, para seguir a Armando y Pablo.

Justo antes del valle del río Corneja encontré otra ascendencia que otra vez dejé con 2.300m y está vez mi impaciencia hizo que me quedase sin cruzar el puerto. Si hubiese aguantado en esa térmica hasta ganar más altura creo que habría pasado el puerto sin problemas pero volví a abandonarla pensando que que se me iban a escapar, lanzándome hacia el puerto sabiendo que no tenía altura pero esperando que sonase la flauta y encontrase algo más adelante. Pero la flauta no sonó y tuve que darme la vuelta poco antes de Casas del Puerto para aterrizar en una campa a la que había echado el ojo antes, en el cruce de la N-110 con la carretera de Villafranca. Luego me enteré de que es la campa habitual para aterrizar cuando no se pasa el puerto.

No tardó Ana en venir a recogerme y como estaba convencido de que Armando y Pablo llegaban a Arcones le dije a Ana que le acercaba a Piedrahita y después yo me iba a hacer las recogidas.

Cuando estaba llegando al puerto de Villatoro me llegó el mensaje con la posición de Armando aterrizado en Ávila y ya cerca de allí oí por la radio a Pablo diciendo que iba a aterrizar en La Torre así que imaginé que al llegar a Ávila habían decidido intentar volver a Piedrahita, lo que me confirmó Armando cuando lo recogí. De vuelta recogimos a Pablo a la altura de Muñana. Allí me enteré de que al final Maní había aterrizado también en Ávila, lo que no supimos fue si su padre logró llegar o no a Arcones.

En resumen un vuelo que me supo a poco pues pude haber hecho mucho más, pero me sirvió para aprender mucho y concienciarme sobre todo de que tengo que tener mucha más paciencia en las térmicas, algo en lo que también me insistió mucho Armando.











Doarama
doarama.com


lunes, 4 de agosto de 2014

Miércoles 23 de julio de 2014. Valderredible

Vuelo 67

Coincidiendo con unos días de vacaciones con la familia en Cantabría aproveché para quedar con Pepe, pues sabía que esos días estaba dando cursillos, para ir a conocer la zona de Valderredible. Como el tenía su furgoneta completa con los cursillistas y el scooter para los remontes, me dio el contacto de Luis, un piloto de Suances que también quería volar esos días, para que fuésemos juntos.



Quedé con Luis en Torrelavega y nos fuimos a Valderredible en donde ya estaba Pepe dando el cursillo en la campa de aterrizaje que hay delante del despegue. Luis y yo nos acercamos al despegue a montar y esperar a que hubiese condiciones para volar. Algo más tarde llegó Diego, un piloto de Burgos al que conocí en Arangoiti en el Girando Térmicas.




Después de escuchar los consejos de Pepe, despegué sin problemas. Estuvimos poco más de una hora en el aire disfrutando del espectacular valle de Valderredible y de la compañía de los buitres. Aterrizamos arriba con bastante viento, estilo Harrier, algo que todavía no había hecho nunca.

Una zona muy bonita de la que me llevo un buen recuerdo y a la que espero volver.






lunes, 14 de julio de 2014

Domingo 13 de julio de 2014. Arcones


Vuelo 66.

Subimos sobre las tres y media de la tarde Juan, Carlos Lucas, Juanlu, el Procu, Valdemar (un piloto polaco al que había conocido como un mes antes en La Muela) y yo.



Pensábamos darnos un vuelo disfrutón de tarde, especialmente Juan ya que ese día, y después de un año sin volar, estrenaba su nueva Discus. El viento estaba enfrentado en el despegue pero en altura estaba totalmente cruzado del oeste así que la ladera no funcionaba muy bien pero había térmicas potentes aunque bastante turbulentas.

Estuve por la ladera desde el despegue a Navafría casi todo el rato hasta que me aburrí y me salí al valle hacia Matabuena pero en el valle no trinque nada así que acabé enfilando a la campa.

Una horita de vuelo movido, hasta la media hora de vuelo no empecé a relajarme y disfrutar, hacía mucho que no volaba en condiciones de térmica dura y lo noté mucho. En el aterrizaje me quedé mirando a suelo con el consiguiente barrigazo.

Juan tardó un poco más en despegar y encontró unas condiciones un poco mejores así que se pegó dos horitas de vuelo, una muy buena toma de contacto con su nueva ala. En la aproximación se quedó un poco corto y tuvo un percance con un enebro que afortunadamente se solventó con sólo un par de montantes rotos.



jueves, 10 de julio de 2014

Sábado 5 de julio de 2014. Arcones - La Hoya

Vuelo 65

Mi primer despegue desde La Hoya. Nos juntamos un buen grupo de pilotos en La Hoya ya que Blay (padre) había invitado a volar a Arcones a los habituales de Peter para volar juntos como homenaje a Juanito. El día parecía bueno y pusieron un prueba directa a Lerma (108 km)

Ya había estado una vez en el despegue de La Hoya pero no me atreví a despegar, lo lejanas que parecen las campas de aterrizaje hacia el sur y lo complicado de la recogida en caso de aterrizaje en esa vertiente hacen casi obligatorio trincar para tirarse hacia atrás, por eso esa vez no me animé a volar y está vez tampoco estaba mucho más decidido pero me puse a montar albergando la esperanza de que rolara el viento y se pusiera de norte para poder despegar en la dirección habitual.
Volando directo "al agujero"

Al final el viento no roló y poco a poco fue despegando todo el mundo, el primero Ako que se fue directo a una térmica que le marcaba un buitre y en la que ganó altura rápidamente y se tiró atrás, al abuelo le costó algo más remontar y estuvo peleando un buen rato en la sur. Así fueron saliendo todos y tirándose "patrás" sucesivamente hasta que nos quedamos los últimos para despegar Pablo y yo.

La verdad es que las condiciones eran perfectas pero yo estaba muy nervioso y me lo pensé un buen rato antes de despegar. Como iba obsesionado con pasarme atrás, me fui hacia el agujero nada más despegar y no conseguí ganar altura así que acabe colándome hacía el otro lado muy bajo y me comí todo el sotavento que me tiró directo al suelo en un -5 continuo para aterrizar entre Matabuena y la ladera.
Recién aterrizado

Pablo tuvo más paciencia y acabó trincando y pegándose un vuelazo quedándose a unos 20km de Lerma. Fue una pena que yo no tuviera la misma paciencia pues todo el mundo voló un montón, pero me quedó el buen sabor de boca de mi primer despegue de La Hoya y de todo lo aprendido, que fue mucho.


No tardó en recogerme el Procu (mil gracias) que se había venido para hacer las recogidas. Me dejó en Arcones y se marchó para buscar a más gente. Ya tarde me llamó Pablo para pedirme si podía ir a buscar con su coche a Jesús Berlanga que había aterrizado pasado Burgos, en Arlanzón. Como Pablo estaba volviendo quedamos a mitad de camino en la carretera de Burgos y se paso a mi coche para acompañarme en la recogida de Jesús. Aprovechó para llamar a Alex, un antiguo compañero de vuelo que vive en el pueblo en el que aterrizó Jesús, para que se pasara a tomar una caña con nosotros.

Cuando llegamos a Arlanzón encontramos a Jesús y Alex de cañas en el bar y después de tomarnos una cerveza más con ellos nos fuimos a por el ala de Jesús y de vuelta a Arcones. Llegamos a la una de la madrugada a Arcones y lógicamente ya se habían tomado la paella que habían preparado para celebrar los vuelos juntos, aunque nos dejaron reservados unos platos para que la probáramos. Poco después me volví a Villalba a donde llegué a las tres tras haberme chupado a lo tonto casi 500 kms.

martes, 8 de julio de 2014

Viernes 4 de julio de 2014. Arcones

Vuelo 64.


Ya tenía ganas de darme un vuelete después de dos meses sin volar y varios intentos fallidos.

Quedé con Pablo (Carpanta) en Arcones pues el venía en moto desde Santander, también se vinieron Carlos y Eva.

21 años después volvemos a volar juntos, aunque esta vez
 cada uno con su ala
Fue un vuelo muy disfrutón, el viento estuvo muy cruzado del oeste por lo que la ladera no funcionaba muy bien pero si que hubo buenas térmicas.

Al final hora y media de vuelo con buen aterrizaje y despegue y el buen sabor de boca de ver a Pablo en el aire otra vez.

Se me olvidó la cámara pero en el aterrizaje estaba Valín grabando así que pude llevarme mi aterrizaje de recuerdo. Gracias Maestro.








viernes, 9 de mayo de 2014

Jueves 1 de mayo de 2014. Pedro Bernardo

Vuelo 63.


Primer día del III Open de Ala Delta de Pedro Bernardo... ¡Y con buen tiempo!... ¡Y sin previsión de lluvia! Después de las dos ediciones anteriores marcadas por el frío, el granizo y el viento, parecía mentira que empezase el Open con un día tan soleado y con perspectivas de mantenerse estable en las siguientes jornadas.



Nos juntamos para las recogidas Tasi (un piloto de Barcelona al que no conocía) Gerardo Rocha (piloto chileno que está haciendo una gira por las competiciones europeas) Pablo Gómez-Trenor y yo, además de Nene que haría las veces de conductor.

Pusieron una prueba que discurría primero por la cuerda hasta el punto geodésico para volver luego a Ramacastañas y después por el valle a Navalcán y gol en La Iglesuela. Como siempre, no tenía ninguna esperanza de poder hacer la prueba y me conformaba con hacer el start y acercarme lo más posible a la primera baliza. Lo importante era disfrutar del vuelo y pasarlo bien.




Despegué de los últimos y estuve un buen rato en el morrete que hay al sur del despegue manteniéndome rascando ladera mientras esperaba a que se desprendiese algo. Por fin encontré una buena térmica con la que gané altura hasta ponerme por encima del despegue y puede acercarme a la cuerda en la que fui ganando altura muy despacio y currando mucho para acercarme al Cabezo.

Cuando estaba llegando al hombro que hay antes de la cima del Cabezo oí por la radio a un piloto reportando la caída de un ala cerca de Casavieja. A partir de ese momento estuve más pendiente de la radio que del vuelo, me desconcentré y comencé a hundirme en el valle que hay tras el despegue. Estaba perdiendo altura rápidamente en un -3 continuo y empecé a dudar de si llegaría a la campa, me quedaba la esperanza de ganar planeo al superar el morrete sur y salir así de la zona sotaventada en la que estaba; y efectivamente así fue, nada más sobrepasar el morrete comencé a planear mejor y pude llegar a la campa, aunque con la altura justa para hacer únicamente dos giros antes de aterrizar.

En la campa todos estábamos nerviosos por el tema del accidente, comunicando a la organización quienes estábamos aterrizados y de quienes teníamos noticias de estar aún en vuelo..

Tras desmontar, fuimos a por Gerardo a Ramacastañas, después recogimos a Tasí cerca del aeródromo y nos dirigimos a La Iglesuela donde estaba el gol que había logrado hacer Pablo.

Nada mas llegar a la Iglesuela me encontré a Ana destrozada pues ya se sabía que el piloto accidentado había fallecido, un poco más tarde nos enteramos de que era Juanito. El mazazo fue enorme, no podíamos creerlo.


No me había dado tiempo de conocer demasiado a Juanito, pues no vuelo mucho y menos aún en Pedro Bernardo, pero si tuve tiempo de cogerle cariño pues era una persona muy entrañable, lo recuerdo siempre sonriente y de broma. Nunca me olvidaré de que fue la primera persona a la que conocí en el despegue de Piter cuando fui a volar allí por primera vez. Yo estaba un poco asustado pues el sitio tenía fama de ser durillo de volar y Juanito me quitó enseguida los temores tranquilizándome y animándome a volar; eso si, cada vez que pasaba a mi lado mientras montaba el ala, murmuraba un sonoro "putos Arconianos" y me miraba partiéndose de risa. 

Te echaremos de menos amigo, ¡vuela alto!



lunes, 28 de abril de 2014

Domingo 27 de abril de 2014. Pedro Bernardo.

Vuelo 62.




Un día sin mucha historia. Fuimos Pablo (Físico) Carlos (Parapen) Antonio (Lechón) y yo.

Aunque en el despegue el viento estaba bien encarado, en altura se veía que estaba claramente de norte y fuerte así que supimos que no sería un gran día de vuelo y que no podríamos coger mucha altura.

Estuvimos más o menos una hora peleando por mantenernos en las térmicas rotas que había y que tampoco permitían ganar mucha altura pues enseguida se deshacían. 


Volví a hacer un mal despegue. En la aproximación noté el ala muy dura y acabe aterrizando con las ruedas, luego me di cuenta de que llevaba toda la tensión metida. :-(




domingo, 9 de marzo de 2014

Sábado 8 de marzo de 2014. Alto Rey

Vuelo 61

Habíamos pensado en ir a Peter, pero como la previsión allí era de este, finalmente decidimos ir al Alto Rey en el que la previsión daba vientos de sur.




Fui con Juan y en Bustares nos encontramos con Pablo (Físico) y Carlos (Parapén). El día estaba espectacular, cielo totalmente azul y limpio y muy buena temperatura para estar a primeros de marzo.

Fue otro día de esos en los que se aprende mucho. El vuelo en general bastante movidito, cerca de la montaña funcionaba la ladera pero también había pelotazos térmicos que obligaban a tener mucho cuidado ( llegamos a girar algún +3 con picos de +4.5). Al salir al valle había importantes descendencias.


Vídeo de Pablo

Estuvimos poco más de una hora en el aire, girando térmicas en compañía de los buitres y disfrutando de la estampa nevada tanto del Ocejón como de la sierra de Ayllón.

Tuve que aterrizar en la inmensa campa que hay al este del pueblo pues debido a las descendencias no llegaba a la campa oficial (incluso en algún momento llegué a pensar que tampoco llegaba a esta campa). Este aterrizaje no me gusta pues está lleno de piedras y tiene pendiente hacia abajo. Al final Carlos y Pablo también aterrizaron  junto a mi.




Tras recoger volvimos a subir al despegue pues Juan no había podido desmontar las ballestas de su ala nueva y Carlos aprovecho para pegarse otro vuelete con el ala de Juan.



lunes, 24 de febrero de 2014

Sábado 22 de febrero de 2014. Pedro Bernardo.

Vuelo 60

Otro día que nos sorprendió gratamente. Aunque la previsión no era mala, al llegar a Peter nos encontramos un día feucho y frío, con la nube prácticamente metida en el despegue y amenazando lluvia o nieve lo que nos hacía prever un vuelo balístico directo al aterrizaje.


El ambiente era fantástico para un día de invierno. Nos juntamos diez alas aunque al final sólo volamos nueve, pues a Julio se le olvidó la cola y la barra de control de su Combat.

Según montábamos se alternaban ratos soleados con otros muy cubiertos y fríos. Aprovechando uno de esos ratos soleados e que el viento se encaraba en el despegue empezamos a salir todos.

No conseguí subir por encima del despegue en ningún momento pero disfruté un montón de un vuelo muy peleado para  mantenerme en el aire durante una hora y cuarto. Se alternaban pequeñas térmicas con apoyos dinámicos en el morrete sur de la ladera.

En el aterrizaje, como últimamente estaba empujando tarde, me mentalicé para empujar antes. Pablo en el viaje hacia Peter me había comentado que al aterrizar contará hasta tres y en el uno empujara, pero me lo tomé demasiado al pie de la letra y empujé demasiado pronto y demasiado fuerte para el viento que había, aunque como la Sport 2 es una madre parachutó sin problemas. 

Un buen día de vuelo invernal mucho mejor de lo esperado.



miércoles, 5 de febrero de 2014

Domingo 2 de febrero de 2014. La Muela de Alarilla

Vuelo 59.






Primer vuelo del año. Un día que al principio no parecía nada bueno pero que al final me permitió un vuelete de 40 minutos, a ratos térmico y a ratos dinámico.

Lo mejor el estrenar el año y la buena compañía, coincidimos con Paco y su hijo Carlos, Sandra su padre Luis, Antonio Letón, Pablo, Charlie, Rafa, Javi y al final apareció Daniel Font, al que conocía a través de Facebook y finalmente pude conocer en persona.

Lo peor el aterrizaje, volví a comerme el suelo como ya viene siendo tradición en mi primer vuelo anual.